El sábado 27 de Febrero de 2010, Juan Pablo Álvarez, Director del proyecto "Los descendientes del SS Dresden" y Peter Mulvany, Presidente de la Irish Seamen's Relatives Association homenajearon por primera vez en 121 años a los colonos irlandeses que pasaron cerca de Bahía Blanca, en el frustrado intento de colonia. Los lugares elegidos para tales homenajes fueron las estaciones de tren "Napostá” y "La Vitícola".
En la primera de las estaciones fue donde cerca de 800 colonos arribaron el 27 de Febrero de 1889. Allí pasaron la noche al costado de las vías, durmiendo sobre el equipaje. Al otro día a la mañana partieron aproximadamente quince kilómetros al sur, al lugar donde finalmente se establecería la colonia. Es ahí donde hoy se encuentra la estación que lleva el nombre de la compañía que en 1889 encaró el proyecto de colonización: “La Vitícola”.
Banderas argentinas e irlandesas, cruces y una placa conmemorativa vistieron las estaciones que recibieron y albergaron a cerca de ochocientos inmigrantes que vinieron a la Argentina a bordo del vapor SS Dresden. Este acto, dedicado a quienes intentaron establecer la primera colonia irlandesa del país, fue sencillo e íntimo, solo unas palabras, unas oraciones y los acordes de una gaita que por fin, luego de tantos años, despertaron una memoria adormecida.
To brake the historical amnesia
On Saturday February 27th 2010, the Director of the “Dresden Descendant’s Project”, Juan Pablo Alvarez and Peter Mulvany, Chairperson of the Irish Seamen's Relatives Association (1939-46), honored for the first time in over 121 years, the Irish settlers that came to locations near Bahía Blanca in the first unsuccessful attempt of colonization. The sites chosen for such honors were the railway stations of "Napostá" and "La Vitícola".
It was in "Napostá" station that 800 settlers arrived on February 27th, 1889, where they spent the night on the side of the rails, sleeping on the luggage. On the following morning they all traveled about fifteen miles south, to the spot selected for the establishment of the first colony. It is in this place where now stands the train station that has the name of the company that in 1889 encouraged the colony project: “La Vitícola”.
Argentine and Irish flags, crosses and a commemorative plaque dressed the stations that received about eight hundred immigrants who came to Argentina on board the SS Dresden. This commemorative event, dedicated to those who attempted to establish the first Irish colony in the country, was simple and intimate, only a few words, some prayers and the strains of an uilleann pipe that finally, after so many years, stirred a dormant memory.